Su mejor amiga se llamaba Annie e iba a la misma academia a cantar. Era morena con los ojos azules.

Un día, cuando iban juntas a la academia, se les ocurrió formar un grupo de música. Lo iban a llamar “Charleston”.

 

Estaban muy ilusionadas con  formar este grupo, pero se dieron cuenta que les faltaba algo muy importante: la música.

 

Un día soleado y caluroso, cuando estaban en la terraza, vieron que alguien se mudaba a su portal, al piso se arriba.

El chico se llamaba Peter, era moreno, alto y le gustaba mucho tocar la guitarra.